Inversiones inteligentes: De los pasivos que compran los pobres a los activos que adquieren los ricos

Las diferencias entre ricos y pobres en su forma de invertir

Una de las principales diferencias entre ricos y pobres se encuentra en la forma en que invierten su dinero. Como dice el dicho, los ricos adquieren activos mientras que los pobres pasivos. Los expertos en economía y finanzas afirman que la clave está en invertir en activos, pero seguramente te estés preguntando qué son los activos y en qué puedes invertir tu dinero para mejorar tu economía.

Qué son los activos y los pasivos

Un activo es esencialmente cualquier artículo o bien que coloque dinero en tus bolsillos. Puede ser una propiedad como un departamento o un local comercial que tengas alquilado, recibir regalías por la venta de alguna propiedad intelectual como un libro, o cualquier otra fuente de ingresos. Básicamente, todo puede ser un activo o un pasivo, dependiendo si te genera gastos o ingresos.

Por ejemplo, una casa puede ser un activo o un pasivo. Si la alquilas, te genera un ingreso mensual, por lo que es un activo. Pero si vives en ella, es un pasivo porque saca dinero de tus bolsillos para pagar servicios como la electricidad, el agua y los impuestos. En pocas palabras, un activo es todo aquello que te genera dinero sin que tú debas trabajar mucho por ello, solo el hecho de poseerlo te genera ganancias. Por el contrario, un pasivo es aquello que posees pero que implica un gasto, es decir, saca dinero de tus bolsillos.

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Mentalidad de rico versus mentalidad de pobre

La principal diferencia entre una persona rica y una pobre radica en su mentalidad y cómo afrontan la situación que se les presenta, así como en cómo invierten su tiempo, energía y dinero.

Las personas con una mentalidad de pobreza suelen trabajar muy duro muchas horas y el poco dinero que ganan lo gastan rápidamente. Suelen comprar pasivos que generan gastos y deudas, lo cual los obliga a trabajar más tiempo y más duro para solventar gastos, convirtiéndose en esclavos de sus propias deudas y gastos.

Por el contrario, una persona con mentalidad rica suele trabajar duro en un principio, ahorrar parte de las ganancias y luego invertir estos ahorros para multiplicarlos. Lo logran invirtiendo en activos que generan dinero, lo cual les permite tener más tiempo disponible y conquistar la libertad financiera. El dinero trabaja por ellos y no necesitan cambiar su tiempo por dinero.

Cómo identificar tus activos y tus pasivos

Para identificar tus activos es fácil, solo pregúntate si hoy dejas de trabajar, ¿cuánto dinero puedes generar mensualmente? Si la respuesta es cero, lamentablemente no tienes activos. Pero no te preocupes, gracias a la era digital en la que estamos inmersos, es fácil crear diferentes activos desde la comodidad de tu hogar.

Por ejemplo, puedes crear un canal de YouTube y monetizarlo con anuncios compartiendo un porcentaje de las ganancias con los creadores de contenido. También puedes escribir un ebook, crear un curso online, vender tus fotografías o monetizar un blog con publicidad o membresías. Las opciones son variadas y se encuentran al alcance de cualquier persona con una computadora y conocimientos suficientes para capitalizar sus ideas.

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Para identificar tus pasivos, revisa el resumen de tu cuenta bancaria de los últimos meses y los tickets que guardaste en tu cartera. Revisa cuáles son los objetos y servicios por los cuales has estado pagando y detecta cuáles realmente no necesitas. Procura darte de baja de todas aquellas suscripciones a servicios innecesarios.

Tú eres tu activo más valioso

Más allá de los objetos y las posesiones, tu activo más valioso eres tú mismo. Es importante que cuides de tu energía, tiempo y salud. La mayor inversión que debes hacer es siempre en ti mismo. Procura tomar agua, alimentarte bien, descansar adecuadamente, ejercitarte, formarte y aprender todos los días algo nuevo, por pequeño que sea. Evita consumir sustancias que dañen tu organismo. Trabaja en ti sin prisa, pero sin pausa. No te estreses, medita y disfruta de la vida.

En resumen, las principales diferencias entre ricos y pobres radican en la forma en que invierten su dinero, en su mentalidad y en cómo aprovechan su tiempo y energía. Identificar tus activos y pasivos te ayudará a tomar decisiones financieras más inteligentes. Recuerda que la educación financiera es vital para mejorar tu economía.

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