Enseñando a tus hijos a manejar el dinero a través de juegos y dinámicas
En este artículo, te daremos algunas recomendaciones sobre cómo enseñar a tus hijos conceptos básicos sobre finanzas a través de juegos, desafíos y dinámicas según su edad.
De 3 a 4 años: Introduciendo las monedas
Los niños de 3 a 4 años tienen deseos de aprender y curiosidad, lo cual podemos aprovechar para enseñarles sobre el manejo del dinero. Cuando salgas con tus hijos, trata en medida de lo posible de pagar con dinero efectivo, para que ellos sean testigos del intercambio de dinero por bienes.
Una forma divertida de enseñarles sobre las monedas es a través del juego de identificación. Puedes dibujar las formas de diferentes monedas y colorearlas, luego invita a tu hijo a hacer coincidir la moneda con la imagen mientras mencionan el nombre de cada una.
Además, puedes utilizar las monedas y billetes de diferentes denominaciones para trabajar matemática básica. Por ejemplo, explica que cinco billetes de un dólar son iguales a cinco dólares. Aunque es normal que a esta edad los niños elijan un billete por su tamaño y no por su valor, es importante que vayan comprendiendo la relación entre el dinero y los bienes que pueden adquirir.
Otra actividad divertida es juntar con tus hijos varias monedas, envolverlas y llevarlas al banco para depositarlas o intercambiarlas por billetes. Seguramente tendrán preguntas sobre por qué intercambian diez monedas por tan solo un billete, así podrán aprender sobre el valor del dinero mientras juegan.
También puedes mencionar que el dinero se obtiene como fruto del trabajo y se usa para comprar cosas como helados, juguetes o zapatos. Crea una alcancía transparente donde ellos puedan guardar las monedas a modo de juego, de manera que puedan ver cómo la cantidad de dinero crece dentro de la alcancía.
Además, pueden jugar a intercambiar monedas por juguetes en una tienda ficticia. Aunque sea solo un juego, al intercambiar dinero por bienes, los niños comienzan a comprender los conceptos básicos del comercio.
De 5 a 7 años: Entendiendo el valor del dinero
Para los niños de 5 a 7 años, todavía puede ser difícil comprender conceptos como por qué una persona gana más que otra o qué es un préstamo, pero hay otros que sí podemos enseñarles.
Continúa reforzando que el dinero se obtiene del trabajo y se usa para pagar cosas. Una actividad divertida es jugar al restaurante imaginario en casa, donde pueden aprender a poner la mesa, tener buenos modales y pagar la factura. Seguramente tendrás que recordarles después de la comida ficticia que deben pagar la cuenta, pero una vez que entienden el concepto, se emocionan por saber cómo pagar con dinero o hacer el intercambio.
También pueden hacer ejercicios de intercambio de monedas por juguetes o dulces, ya sea en la calle o en el hogar, utilizando una tienda ficticia. Cuando sea posible, anima a los niños a ayudarte a pagar con billetes y monedas pequeñas en el supermercado, de manera que refuercen el concepto del dinero.
Puedes jugar juegos como el Junior Monopoly para incentivar las matemáticas básicas, el ahorro y el gasto.
Además, a partir de los 7 años, puedes comenzar a darles una mesada a tus hijos. Puedes optar por darles una cantidad específica sin pedirles nada a cambio, o puedes implementar la mesada basada en los deberes que los niños realizan en casa. Es importante darles la mesada de forma semanal, ya que los niños son impacientes y un mes les parece demasiado largo.
Comienza con un monto pequeño y aumenta con el tiempo. Además, puedes regalarles a tus hijos una alcancía donde puedan guardar parte de su dinero para incentivar el ahorro a corto plazo. Cuando hayan ahorrado suficiente para comprar algo que les guste, pueden hacerlo bajo tu supervisión en una tienda real, de manera que aprendan cómo funciona el intercambio.
De 8 a 10 años: Trabajando y ahorrando
A partir de los 8 años, los niños pueden comenzar a comprender conceptos más complejos sobre el dinero. Puedes animar a tus hijos a obtener trabajos de vacaciones en tu casa, como recolectar frutas, lavar el carro de un vecino, regar las plantas, cuidar mascotas, entre otros. Esto les permitirá aumentar el dinero de su mesada y aprender el valor del trabajo.
Es importante que los niños se enfoquen en metas de ahorro a mediano y largo plazo, como la compra de una bicicleta o un nuevo par de patines. Considera la idea de abrir una cuenta de ahorros para tus hijos, donde puedan aprender sobre el valor del ahorro y la función de los bancos.
De 11 a 13 años: Decisiones inteligentes
Durante los primeros años de la adolescencia, es esencial reforzar las enseñanzas financieras en nuestros jóvenes. Puedes enseñarles a comparar precios mientras están de compras, leer etiquetas de diferentes productos y analizar las diferencias de calidad y precio entre marcas reconocidas y genéricas.
Continúa reforzando la idea de ahorrar para metas a largo plazo, ya sea utilizando una alcancía o una cuenta de ahorros en una institución financiera. Además, puedes permitir que tus hijos adquieran trabajos de verano cerca de su hogar, como recolectar frutas, lavar el carro de un vecino, regar plantas, cuidar mascotas, entre otros.
Otra lección valiosa que puedes enseñarles es la de ayudar a los menos favorecidos. Anímalos a compartir parte de sus ingresos con organizaciones benéficas, y a través de una alcancía de caridad, si no tienen una.
Hazle saber a tus hijos que si gastan en algo, no tendrán dinero para otra cosa. Esto les ayudará a comprender la importancia de tomar decisiones de compra inteligentes.
De 14 a 16 años: Presupuesto y toma de decisiones
A esta edad, es fundamental que los jóvenes tengan una opinión sólida y formada sobre las dinámicas relacionadas con el dinero.
Puedes animarlos a hacer un presupuesto personal detallado, ya sea utilizando una aplicación en el celular o anotándolo en un cuaderno. Esto les ayudará a tomar mejores decisiones antes de realizar compras grandes, discutiendo si un gasto es una necesidad o un capricho.
También es importante que tengan claro el concepto de inversión. Pueden aprender sobre la bolsa de valores y la posibilidad de invertir en empresas como Apple, Disney o Coca-Cola. Pueden elegir una empresa cada miembro de la familia, verificar los precios de las acciones y discutir las posibles razones detrás de sus fluctuaciones.
Además, puedes hablar con tus hijos sobre decisiones financieras importantes, como la elección de una universidad, la compra de un auto o la preparación para la vida laboral. Discutan las diferentes formas de ganar dinero, qué tipos de trabajos pueden desaparecer en los próximos años y cuáles tienen potencial de crecimiento.
Enseñar a nuestros hijos sobre finanzas desde temprana edad es invaluable para su futuro. Si quieres obtener más información sobre cómo enseñar finanzas a tus hijos, puedes descargar la app «Aprendiz Financiero», donde encontrarás información útil según la edad de tus hijos.
Recuerda, si educamos adecuadamente a nuestros hijos en temas financieros, tendremos adultos más responsables y menos personas endeudadas. ¡Empieza a enseñarles cuando aún hay tiempo!