¿Dónde se encuentra el dinero de Anna?
En este momento, Anna está preocupada porque necesita pagar el taxi pero no encuentra el dinero en su cartera. Desesperadamente busca en su monedero, en el fondo de la cartera y en su bolsa pequeñita, pero no encuentra nada más que dulces, galletas y facturas. Anna se pregunta dónde estará su dinero.
Investigando los pasos de Anna
Para responder esta pregunta, necesitamos retroceder unas horas y ver qué estaba haciendo Anna. En la mañana, tomó un autobús para ir al trabajo y pagó diez pesos por el boleto. Sin duda, sacó el dinero de su cartera. Después, se detuvo en el bar de enfrente de la empresa donde trabajaba y compró un café pequeño por veinte pesos. Durante la hora del almuerzo, salió a comer y también compró un paquete de galletas. Al terminar su jornada laboral, Anna quería llamar a su esposo, pero se dio cuenta de que no tenía saldo en su teléfono, así que compró una recarga de dieciséis pesos.
Luego tomó un taxi, que la llevó al lugar donde se encuentra ahora.
El dinero comido por las hormigas
Resulta que el dinero de Anna ha sido «comido por las hormigas», es decir, por esos gastos pequeños que parecen insignificantes pero que pueden acumularse y causar problemas si no los controlamos. Por ejemplo, esos diez pesos del boleto, veinte pesos del café, veinticinco pesos del paquete de galletas y dieciséis pesos de la recarga del teléfono parecen montos pequeños individualmente, pero al final del día pueden sumar una cantidad considerable.
- Las bebidas
- Los snacks dulces
- Las recargas al celular
Estos son algunos ejemplos de los gastos hormiga más comunes.
Las bebidas
Las gaseosas, los jugos y el café son bebidas que, si se consumen con frecuencia, pueden sumar grandes cantidades de dinero a largo plazo. Muchas veces las compramos por costumbre o porque somos adictos a ellas. Aunque una bebida individualmente tenga un costo bajo, si la compramos con frecuencia, el gasto acumulado puede ser considerable. Por ejemplo, si diariamente compras un café grande por 50 pesos, al mes estarías gastando alrededor de 1,250 pesos y al año, 15,000 pesos.
Snacks dulces
Muchas personas tienen la costumbre de comprar snacks dulces, como chocolates o galletas, para disfrutar después de las comidas. Estos pequeños gastos individuales pueden parecer insignificantes, pero si los realizas diariamente, se sumarán rápidamente. Por ejemplo, si un paquete de snacks cuesta 20 o 30 pesos y lo compras todos los días, al final del mes estarías gastando una cantidad significativa.
Recargas al celular
Si te quedas sin saldo en el celular durante una llamada, es posible que corras a la tienda a comprar una nueva recarga. Aunque estas recargas suelen ser de pocos pesos, si esto ocurre con frecuencia, el monto se acumula y te das cuenta de dónde se va tu dinero.
Es importante ser consciente de nuestros gastos, incluso si son pequeñas cantidades de dinero. No necesitas resignarte a eliminar por completo estos pequeños placeres, pero debes ser consciente de lo que gastas. Antes de comprar algo, pregúntate si realmente lo necesitas. También puedes poner en tu cartera solo el dinero que necesitarás para ese día, de esta forma evitarás gastar más de lo necesario.
Eliminar los gastos hormiga no te hará rico de la noche a la mañana, pero te ayudará a controlar mejor tus finanzas personales y destinar ese dinero a cosas más importantes. ¿Tienes problemas con los gastos hormiga? ¿Conoces otros ejemplos de gastos hormiga en tu vida diaria? Comparte tu experiencia en los comentarios.
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